Detrás de esa mirada tan encantadora se esconde una chica cruel y dominante. Ahí donde la ven, le encanta quedar con sus esclavos para dedicarles unas bofetadas o pisoteadas en el pecho. Sí, como si de alfombras se tratase, Celina los humilla de mala manera, señalándoles con el dedo y riéndose de su victoria frente a un hombre fracasado.

Click aqui para ver el Video